Martha Corujedo nació en La Habana, Cuba, reside en México a partir de su llegada en 1962. Desde pequeña demuestra un gran interés por el arte y la literatura. A los 18 años se integra al equipo de trabajo de galería de arte Misrachi, una de las principales galerías mexicanas, ubicada en la Ciudad de México, donde realiza una exitosa carrera como coordinadora y promotora de exposiciones individuales y colectivas, así como actividades socio-culturales durante muchos años. Por este medio entra en contacto con el mundo plástico e intelectual y conoce a los más destacados artistas tanto de la Ruptura en adelante como de la Escuela Mexicana, con quienes establece magníficas relaciones de trabajo. El intercambio de ideas, asimilación de propuestas, planeación y realización de proyectos, la experiencia visual constante, las interminables pláticas y lecturas, enriquecen su acervo personal y van prefigurando una inclinación que posteriormente la llevarán a incursionar en la pintura. Decide retirarse de la galería en 1991 para realizar actividades personales. Los primeros años coordina varias exposiciones y colabora en la organización de una subasta, estudia traducción e interpretación inglés-español, participa en diversos talleres literarios y luego de practicar las técnicas necesarias escribe narrativa por su cuenta, labor que continúa desempeñando. En 2007-2008 forma parte del voluntariado en el Museo Tamayo, y a partir del 2009 a la fecha, en el del Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México. En 1996 comienza a estudiar dibujo bajo la dirección del maestro Roberto Ortega, con la intención de definir una temática que finalmente, a partir del año 2000, desemboca en “Escenarios”, título que reúne una serie de trabajos al pastel en los que, mediante líneas y formas, emergen primeros planos que se van construyendo a través de la perspectiva y el uso vibrante y atrevido del color. Elementos fijos, interiores, puertas y ventanas, espacios abiertos, momentos suspendidos, evidencian su presencia evocativa ante nosotros.